Desde el 2011 tengo la suerte de dedicarme a lo que vocacionalmente he deseado desde que elegí la carrera de psicología; trabajar en el ámbito de la psicoterapia. Mi forma de trabajar está dirigida al conflicto presente, para que la persona pueda encontrarse más tranquila. Paralelamente, iremos entendiendo cómo lo que te ocurre se sustenta en tu historia de vida.
Siempre he buscado una línea de trabajo integrativa. De esta forma puedo atender lo cognitivo, pero sin obviar otras partes importantes: la parte emocional, el cuerpo, lo psicosomático, lo creativo, etc. Mi práctica clínica se basa en varias corrientes de psicoterapia que aplico con cada paciente de manera distinta, adaptándome a su personalidad. Cada realidad individual es diversa y compleja y por lo tanto la psicoterapia también debe ser una especie de «traje a medida».